CIUDAD DE MÉXICO, 23 jul (Reuters) – El presidente Andrés Manuel López Obrador relevó jueves a su secretario de Comunicaciones y Transportes tras disentir con el funcionario sobre su plan de entregar a militares el control de los puertos, en medio de un creciente tráfico de drogas sintéticas a través de México.
El gobernante anunció hace unos días que la Secretaría de Defensa y la de Marina se harían cargo de los controles aduaneros para evitar la introducción ilegal de drogas al territorio nacional y contrarrestar la enquistada corrupción en esos espacios.
El secretario que deja el cargo, Javier Jiménez, de 82 años y quien ocupaba el puesto desde que López Obrador llegó al poder en diciembre de 2018, fue sustituido por Jorge Arganis Díaz, un ingeniero civil también con una trayectoria profesional de varias décadas en el sector público y privado.
“Tuvimos un diferendo que solo se da entre hombres libres y con criterio a cerca de la operación de los puertos”, dijo el presidente al anunciar el reemplazo en un mensaje grabado en su cuenta de la red social Twitter.
López Obrador dijo también que México necesita una buena administración y seguridad en sus puertos al justificar el apoyo de los agentes de la marina, y expresó su preocupación por la entrada al país de la droga fentanilo, que llega desde Asia y se redistribuye en Estados Unidos.
El mandatario reconoció también que el trasiego de amapola y marihuana ya no es la principal inquietud del Gobierno, sino el tráfico de ese otro estupefaciente sintético.
La gestión de Jiménez estuvo signada por la cancelación de la obra en marcha de un nuevo aeropuerto para la capital mexicana, valorado en 13,300 millones de dólares, considerada un golpe a la seguridad jurídica dado incluso por el presidente pocos meses antes de asumir el poder.
Reporte de Lizbeth Díaz. Escrito por Raúl Cortés Fernández
