Promoción web: Desde hace más de un año las acciones de biotecnología vienen sufriendo fuertes caídas, a pesar de los avances médicos que continúan surgiendo, una desconexión que probablemente no durará, en nuestra opinión.
Introducción: El sector de biotecnología, pese a sufrir la corrección más profunda y duradera de su historia, parece más fuerte que nunca – afirma el gestor de cartera Andy Acker – gracias a la aceleración de la innovación y al reajuste de las valoraciones.
ASPECTOS DESTACADOS
- A lo largo del año pasado, la biotecnología se vio atrapada en una histórica oleada de ventas masivas, fruto de la cual las acciones del sector retrocedieron más del 50%, de media.
- Sin embargo, en nuestra opinión, los motores del crecimiento a largo plazo del sector no han sufrido deterioro, sino todo lo contrario. Se prevé que los avances científicos, unido a una sólida financiación, alentará las ventas a una tasa media del 9% anual hasta 2026.
- Al mismo tiempo, el índice S&P Biotech Sector cotiza a la mitad de su promedio a largo plazo, lo que podría preparar al sector para una fuerte remontada.
Aunque los mercados mundiales de renta variable llevan retrocediendo desde el inicio de 2022, en el caso del sector de biotecnología las ventas vienen sucediendo desde hace mucho más tiempo. Desde el máximo alcanzado el 8 de febrero de 2021, el SPDR® S&P® Biotech ETF (XBI), un índice de referencia ampliamente usado en el sector, ha cedido más del 50%, quedándose a la zaga del S&P 500® Index en más del 60%; esto representa la contracción más prolongada en la historia del XBI (más de 270 sesiones de Bolsa), así como la más profunda, tanto en términos absolutos como relativos.1
Es fácil sentirse desanimados por este mal comportamiento, pero no creemos que la perspectiva a largo plazo de la biotecnología se haya visto mermada. Por el contrario, con la contracción de las valoraciones y la aceleración de la innovación en el sector, diríamos que los argumentos a favor de la biotecnología no han hecho más que reforzarse.
Reveses coyunturales, valor a largo plazo
Se han mencionado diversas razones para explicar el reciente repliegue de la biotecnología. Para empezar, se produjo después de un mercado de salidas a Bolsa (OPV) inflado, inducido por estímulos monetarios y la euforia por la histórica respuesta del sector frente a la COVID-19, que disparó las valoraciones de las empresas en su etapa inicial. Luego se vio afectado por el renovado impulso de reforma sobre los precios de los medicamentos en Estados Unidos y la ausencia de un comisario permanente en la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), lo cual pudo haber contribuido a la adopción de decisiones normativas imprevistas. Y, por último, la perspectiva de subidas de los tipos de interés provocó una huida de los activos de mayor duración, entre ellos la biotecnología.
Creemos que muchos de los problemas que sufre el sector están dando muestras de remitir. Las propuestas que permitirían al gobierno de EE. UU “negociar” los precios de los medicamentos se han moderado y, en su formato actual, afectarían solo a un subgrupo pequeño de fármacos que están a punto de perder la exclusividad.2 La aprobación de legislación también podría suprimir el exceso de incertidumbre que aqueja al sector. La FDA ha seguido aprobando medicamentos a un ritmo rápido: 50 nuevos en 2021, acorde con el elevado ritmo de los últimos años, incluso antes de que se ratificara un comisario permanente a principios de 2022.3 Los estudios muestran una escasa relación entre las rentabilidades de la biotecnología y los tipos de interés. De hecho, entre 2000 y 2021, las acciones del sector se apreciaron en seis de los nueve años en que aumentaron los rendimientos del Tesoro estadounidense a 10 años.4
El auge de las OPV acaecido en el sector de biotecnología en 2020 y 2021 se detuvo ante la volatilidad del mercado y el giro hacia una política monetaria más restrictiva. Probablemente debió hacerse algún ajuste de cuentas: en los últimos dos años, las empresas privadas solían embarcarse en salidas a Bolsa pocos meses después de su última operación privada, comparado con el plazo más habitual de un año, todo ello mientras captaban primas de como mínimo el 50% o 100%. Además, un porcentaje creciente de empresas salían a Bolsa en las primeras fases de desarrollo, lo que elevó los riesgos que asumían los inversores en desarrollo y plazos para alcanzar la rentabilidad.5
La paralización de las OPV podría atenuarse cuando remita la volatilidad del mercado y se esclarezca la trayectoria de las subidas de tipos. Entre tanto, hay razones para creer que muchas áreas del sector han sufrido sobreventas. A fecha de principios de 2022, nada menos que el 16% de las compañías biotecnológicas estadounidenses cotizaban por debajo del nivel de tesorería que reflejaban sus balances, más que durante los ciclos bursátiles bajistas de 2002 y 2008 (8% y 11%, respectivamente).6 A finales de febrero, las valoraciones de las biotecnológicas de gran capitalización se situaban muy por debajo de su promedio histórico y del promedio del conjunto del mercado bursátil (Gráfico 1).
Gráfico 1: Las valoraciones de las biotecnológicas disminuyen
Fuente: Bloomberg, del 30 de septiembre de 1992 al 28 de febrero de 2022. El S&P Biotech Sector se compone de las compañías biotecnológicas de gran capitalización que integran el S&P 500 Index. La ratio Precio/Beneficios adelantados (PER) mide el precio de las acciones de una empresa comparado con los beneficios por acción que se estima generará en el futuro para un determinado valor o valores de una cartera.
La innovación impulsa el crecimiento
A pesar de las ventas masivas sufridas por las acciones biotecnológicas, la innovación del sector no ha dejado de avanzar. El año pasado, más de la mitad de los medicamentos aprobados por la FDA se consideraron de primera clase, lo que significa que contaban con mecanismos de acción distintos de los empleados en las terapias existentes. Casi tres cuartas partes (74%) de ellos usaban uno o más métodos de desarrollo y revisión acelerados, accesibles para fármacos con potencial de aumentar considerablemente el nivel de atención médica.7
Es importante observar que la cartera de fármacos en desarrollo se está expandiendo. Más de 6.000 medicinas del mundo entero se encuentran en fase activa de desarrollo, lo que supone un aumento del 68% respecto a 2016, de acuerdo con el IQVIA Institute.8 La financiación ha sido abundante: en 2020, los sectores de biotecnología y farmacéutico registraron operaciones de capital riesgo por valor de 27.000 millones de USD, seguido de 38.000 millones en 2021.9 Por su parte, las biofarmacéuticas de gran capitalización gastaron la cifra récord de 133.000 millones de USD en investigación y desarrollo el año pasado, lo que supone un aumento del 44% respecto a 2016.10 Aún así, las biotecnológicas de pequeña y mediana capitalización son responsables de la mayoría de moléculas que se están desarrollando en la actualidad, mientras que sus homólogas de gran capitalización se enfrentan a un inminente vencimiento de patentes para muchos de los medicamentos más vendidos. Por consiguiente, es probable que durante los próximos años estos gigantes del sector, gracias a sus grandes reservas de liquidez, traten de reponer sus carteras de productos mediante fusiones y adquisiciones (F+A) o alianzas estratégicas. En este sentido, se estima que un grupo de 18 compañías farmacéuticas dispondrá en 2022 de aproximadamente 1,7 billones de USD en fondos totales para acometer operaciones, incluidos más de 500.000 millones en efectivo.11
Posicionándose para la recuperación
No se sabe qué es lo que desencadenará el rebote de la biotecnología. Tal vez una reactivación de las fusiones y adquisiciones, una mayor certidumbre sobre la reforma de precios de los medicamentos u otra cosa; pero sí sabemos que después del mínimo alcanzado tras las últimas 11 correcciones de al menos el 20%, el XBI ha arrojado una rentabilidad mediana del 50% en los 12 meses siguientes.12 Además, a largo plazo, las rentabilidades generadas por los valores de biotecnología de gran capitalización históricamente han estado correlacionadas con la facturación generada de los fármacos. Dada la creciente demanda de atención médica y unos precios de farmacéuticas que se mantienen estables (especialmente conforme entran más medicinas que revolucionan el nivel de atención médica) se prevé que la facturación aumente a una tasa de crecimiento anual compuesta del 9% entre 2020 y 2026 (Gráfico 2).
Gráfico 2: Nasdaq Biotechnology Index frente a Facturación agregada de productos, 2000-2026E
Fuente: Cowen and Company, a 25 de febrero de 2022. Datos del 31 de diciembre de 1999 al 31 de diciembre de 2026.
Nota: La facturación es la suma de cifras reales y estimadas de ingresos correspondientes a 65 empresas representativas del sector de biotecnología. El Nasdaq Biotechnology Index es un índice bursátil compuesto por valores de empresas cotizadas en Nasdaq clasificadas de acuerdo con el Índice de Referencia de Clasificación del Sector, bien como el sector de biotecnología o el farmacéutico. Barras rojas = estimado.
A medida que discurrimos por este periodo arduo para la biotecnología, sabemos que a algunas empresas les resultará más fácil sobrevivir al entorno actual del mercado que a otras. Las que posean un volumen de facturación/beneficios relevante, múltiplos más bajos y/o catalizadores de proyectos en desarrollo a corto plazo podrían estar en mejores condiciones que empresas menos líquidas en fases de desarrollo más tempranas. Los sólidos balances también pueden contribuir a sustentar las valoraciones. Pese a todo, a largo plazo, mantenemos el mismo optimismo que siempre sobre el potencial de crecimiento del sector y creemos que la actual corrección (como otras muchas que la han precedido) algún día dará paso a una recuperación.