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La educación es el primer ladrillo de un futuro sostenible

Por: Dra. Mónica Porres Hernández, Rectora Institucional de la Universidad del Valle de México.

La educación sustentable, como un agente de cambio, ha buscado crear una sociedad más justa que pueda vivir en paz. Sin embargo, hoy nos enfrentamos a diversos retos, tanto sociales como económicos, y los conocimientos adquiridos en la universidad pueden ser fundamentales para que los jóvenes consoliden su vida laboral con un compromiso ambiental.

Reflexionar sobre esto nunca había tenido tanta relevancia como ahora. Es la generación Z la que ha mostrado un constante interés en el cuidado de los recursos, por ello, la academia debe estar lista y abordar nuevos horizontes basados en esta preocupación.

El marco del Día Internacional de la Educación, que se conmemoró en este mes de enero, es un buen momento de analizar el mensaje de la UNESCO sobre forjar un nuevo contrato social donde la enseñanza de nivel superior sea una ventana para los jóvenes hacia horizontes más comprometidos con el medio ambiente[1].

De acuerdo con el Foro Económico Mundial, en una encuesta realizada a 10 mil jóvenes de entre 16 y 25 años, 70% se mostró extremadamente preocupado por el cambio climático. Por su parte, la UNESCO afirma que la formación debe empoderarnos a cuidar del planeta[2], creando una sociedad más justa que pueda vivir en completa paz[3].

Cuando se trata de aquellos estudiantes que se encuentran a punto de egresar, es importante considerar los aspectos anteriores en su plan de estudios y cómo esto puede hacerlos sobresalir en su vida laboral y destacar con ventajas competitivas aprendidas en la academia para abordar los retos y compromisos que las empresas o el emprendimiento requieren.

Considerando que la formación universitaria juega un papel esencial para afrontar los problemas mundiales, los profesores deben comprender la importancia de las dimensiones cognitiva, conductual y socioemocional de la educación sustentable. Sin embargo, señalan que los planes de estudio no cubren lo suficiente temas como consumo, producción sostenible y cambio climático[4].

De acuerdo con datos del Centro de Opinión Pública de la Universidad del Valle de México, 40% de los jóvenes mencionaron que ha sido difícil obtener su primer empleo[5]; esto representa un gran reto para las instituciones de educación pública y privada, ya que entre más actualizados sus programas, mejores egresados saldrán al mundo laboral.

El futuro es relevante y los jóvenes son una pieza clave accionable; para lograr que los estudiantes de nivel superior superen la tasa de deserción del 10% se deben crear planes que aborden los temas de sostenibilidad y su aplicación a casos reales.

[1] Día Internacional de la Educación. (2024b, enero 17). UNESCO. Recuperado 16 de enero de 2024, https://www.unesco.org/es/days/education

[2] Día Internacional de la Educación. (2024, 17 enero). UNESCO. Recuperado 16 de enero de 2024, de https://www.unesco.org/es/days/education

[3] UNESCO. (2021). Education International – the global voice of teachers and education workers. UNESDOC. Recuperado 16 de enero de 2024, de https://unesdoc.unesco.org/ark:/48223/pf0000379914

[4] UNESCO. (2021). Education International – the global voice of teachers and education workers. UNESDOC. Recuperado 15 de enero de 2024, de https://unesdoc.unesco.org/ark:/48223/pf0000379914

[5] De Opinión Pública, C. (2022, 12 octubre). ENCUESTA NACIONAL DE EGRESADOS 2022 – Centro de Opinión Pública UVM. Centro de Opinión Pública UVM. Recuperado 17 de enero de 2024, de https://opinionpublica.uvm.mx/estudios/encuesta-nacional-de-egresados-2022/