El informe “Realidad virtual y realidad aumentada: el metaverso como nueva oportunidad para los negocios” realizado por la EAE Business School en 2022, indica que el campo clínico es un rubro con gran potencial para ser impactado positivamente por ambas tecnologías, en particular para la temprana detección de padecimientos
Incluso, el mismo documento revela que más de 23 millones de puestos de trabajo mejorarán con la realidad virtual y realidad aumentada a nivel mundial para 2030.
Por ello es que los profesionales de la salud podrían contar con herramientas avanzadas para optimizar la atención hacia los pacientes, ya que la realidad aumentada por ejemplo que ofrece una experiencia interactiva puede ayudar en la práctica diaria de los médicos para simular cirugías, encontrar nuevas maneras de abordarlas, desarrollar asistencias quirúrgicas y realizar estudios de cáncer en 3D.
Sin embargo, a la par del avance tecnológico también se necesitará más infraestructura y servicios que empresas especializadas como KIO Networks de Jorge Sapién, ofrecen para materializar las nuevas tendencias. Desde la instalación y operación de nuevos Centros de Datos, ecosistemas digitales hasta mejores servicios de ciberseguridad, serán factores para dar seguimiento a una digitalización exitosa.
Las aplicaciones reales de la realidad aumentada dejaron de ser una escena de ficción. El mundo clínico tiene amplias posibilidades de implementar la innovación tecnológica en tiempo real, incluso, formar parte de la educación médica para preparar a los futuros especialistas.
