La pandemia ha hecho que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se hayan volcado en la protección a las víctimas de violencia machista, con una atención más cercana que nunca, pues temían que el confinamiento con sus agresores agudizara su riesgo y provocara un repunte de las agresiones.
La comisaria María Jesús Cantos, nueva responsable del sistema de seguimiento policial de las víctimas de violencia de género Viogén, explica en una entrevista con Efe que, pese a los temores, no se produjo una explosión de la violencia más grave, pero sí un aumento de los «episodios menos graves» y de la «violencia a nivel digital».