- Es transmisible a través de toallas, zapatos y ropa contaminada; además, es muy común que se presente en los meses cálidos y húmedos.
- Este padecimiento provoca comezón entre los dedos de los pies; además, de desprendimiento de la piel o despellejamiento.
Si en estas vacaciones de verano se acude con hijas e hijos a balnearios públicos, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en el Estado de México Oriente recomienda tomar las medidas necesarias para prevenir el pie de atleta, dado que el calor y el incremento de la humedad son factores que propician las condiciones para las infecciones en la piel.
El pie de atleta es una infección producida por un hongo que se aloja alrededor de los dedos de los pies; se observa en mujeres y hombres de todas las edades que utilizan zapatos cerrados, o bien, que siempre tienen húmedos los pies.
La médica adscrita a la Coordinación de Prevención de Atención a la Salud, Tatiana Van Der Heyden Pardo, del IMSS Estado de México Oriente, explicó que este padecimiento provoca comezón entre los dedos de los pies, desprendimiento de la piel o despellejamiento, y en ocasiones grietas y ardor tanto en la planta y los dedos del pie.
Comentó que se le llama “pie de atleta” porque los atletas desarrollan esta afección a menudo y uno de los mecanismos por los cuales el hongo se instala en la planta de los pies es porque es un sitio que generalmente está oscuro y húmedo; asimismo, destacó que es una afección transmisible a otras personas por medio de toallas, zapatos y ropa contaminada.
“Todos sudamos de los pies, sobre todo cuando se utilizan tenis de material sintético o, en su defecto, cuando una persona camina en lugares donde el piso es húmedo como los baños públicos o las albercas; aunado a ello, cuando la persona no se realiza el aseo adecuado y no seca bien sus pies, entonces estos factores propician la instalación del hongo”, subrayó.
Entre las recomendaciones que se deben de atender para evitar el pie de atleta, dijo, es necesario que las mujeres y hombres utilicen sandalias adecuadas en los baños públicos y albercas, lavar y secar perfectamente los pies, además de utilizar talcos a base de zinc, lo cual contribuye a evitar que se instale el hongo que lo produce.
La especialista indicó que el aseo general y el uso de antifúngicos de aplicación local son suficientes para controlar este padecimiento, de igual modo, seguir las siguientes medidas de prevención:
- Usar sandalias frecuentemente, sobre todo en época de calor.
- Lavado diario de pies.
- Cambio regular de calcetines.
- Usar zapatos diferentes cada día.
- Proteger los pies con sandalias, si visitan lugares públicos (baños, albercas, vestidores).
- Si se vive con otras personas, no compartir zapatos, ropa, toallas, para evitar la propagación.
