- Los dividendos mundiales alcanzaron la cifra récord de 606,100 millones de dólares, un 8.2% más en términos subyacentes.
- Los dividendos en los mercados emergentes aumentaron un 18.4% sobre una base subyacente.
- El crecimiento global del 5.8% se vio afectado por los tipos de cambio, especialmente la debilidad del yen.
- Las petroleras fueron el principal motor del crecimiento en los mercados emergentes en el segundo trimestre.
- El 92% de las empresas de todo el mundo aumentaron los dividendos o los mantuvieron estables.
- Europa dominó el segundo trimestre y registró un récord de repartos, con un aumento interanual del 7.7
- Los bancos impulsaron un tercio del crecimiento interanual de los dividendos.
- Aumento de las previsiones para 2024: 1.74 billones de dólares, lo que supone un incremento interanual subyacente del 6.4%, frente al 5.0% anterior.
Los inversores mundiales en renta variable disfrutaron de un segundo trimestre de 2024 muy sólido, según el último Janus Henderson Global Dividend Index. Los pagos aumentaron un 5.8% en términos generales, hasta alcanzar un récord histórico de 606,100 millones de dólares. El crecimiento subyacente fue aún mayor, del 8.2%, si se tiene en cuenta el lastre causado por los tipos de cambio, especialmente la debilidad del yen japonés.
En el segundo trimestre, los dividendos de los mercados emergentes se distribuyeron entre una amplia gama de países, y las tasas de crecimiento también divergieron notablemente. En conjunto, los dividendos ascendieron a 42,400 millones de dólares, un 18.4% más en términos subyacentes. Entre los países donde el segundo trimestre es estacionalmente importante, el crecimiento más rápido se produjo en Colombia, Tailandia y Brasil, en cada caso gracias a las compañías petroleras.
El inicio del pago de dividendos por parte de grandes empresas estadounidenses, entre ellas Meta y Alphabet, impulsó la tasa de crecimiento mundial del segundo trimestre en 1.1 puntos porcentuales, pero el panorama fue, no obstante, de crecimiento generalizado: a escala mundial, el 92% de las empresas aumentaron los dividendos o los mantuvieron estables. Además, un tercio de los sectores registró un crecimiento subyacente de dos dígitos y sólo tres sectores vieron caer sus dividendos.
El segundo trimestre marca el punto álgido de la temporada en Europa. El total de 204,600 millones de dólares marcó un récord histórico para la región, ya que los pagos aumentaron un 7.7% interanual. Francia, Italia, Suiza y España registraron dividendos récord. Más de la mitad del crecimiento de los dividendos europeos procedió de los bancos, que se han beneficiado de la subida de los tipos de interés. En Alemania, los dividendos cayeron un 1.2% interanual, con un importante recorte de Bayer como principal efecto negativo.
En EE.UU., los dividendos aumentaron un 8.6%; dos quintas partes de este crecimiento se debieron a que Meta y Alphabet pagaron su primer dividendo.
El segundo trimestre también es estacionalmente importante en Japón, donde los dividendos subyacentes aumentaron una séptima parte, alcanzando un nuevo récord en yenes, pero la debilidad del tipo de cambio hizo que el segundo trimestre no superara los máximos anteriores en dólares. La mayor contribución al crecimiento provino de Toyota Motor, que es el mayor pagador de dividendos de Japón y realizó uno de los mayores aumentos, tras los beneficios récord de su último ejercicio. En el resto de Asia-Pacífico, los pagos se mantuvieron estables en Hong Kong y se redujeron significativamente en Australia, debido a un recorte de Woodside Energy. Singapur, Taiwán y Corea del Sur registraron aumentos de dos dígitos.
Una vez más, los bancos fueron el motor más importante del aumento de las remuneraciones, con un tercio del incremento interanual subyacente. Los bancos europeos fueron los que más contribuyeron, pero la tendencia fue evidente en todo el mundo. Las aseguradoras, los fabricantes de vehículos (especialmente en Japón) y las telecomunicaciones también contribuyeron de forma importante al crecimiento en el segundo trimestre.
Tras un sólido segundo trimestre, y para tener en cuenta la fuerte contribución que podrían hacer este año las nuevas empresas de dividendos, Janus Henderson ha mejorado su previsión de dividendos para 2024. La gestora de fondos globales espera ahora que las empresas de todo el mundo distribuyan la cifra récord de 1.74 billones de dólares, un 6.4% más que en 2023 en términos subyacentes (frente al 5.0% de su informe del primer trimestre) y equivalente a un incremento global del 4.7% (frente al 3.9%).
Jane Shoemake, Gestora de carteras de clientes del equipo Global Equity Income en Janus Henderson, declaró: «Teníamos expectativas optimistas para el segundo trimestre y el panorama fue aún más alentador de lo que preveíamos gracias a la fortaleza de Europa, EEUU., Canadá y Japón. En todo el mundo, las economías han soportado en general bien la carga de unos tipos de interés más altos. La inflación se ha ralentizado y el crecimiento económico ha sido mejor de lo previsto. Las empresas también se han mostrado resistentes y en la mayoría de los sectores siguen invirtiendo para crecer en el futuro. Este contexto favorable ha sido especialmente positivo para el sector bancario, que disfruta de unos márgenes sólidos y un deterioro limitado del crédito, lo que ha reforzado los beneficios y generado mucho efectivo para dividendos.
«El inicio de los dividendos de las grandes empresas tecnológicas estadounidenses Meta y Alphabet, junto con la china Alibaba, entre otras, es una señal realmente positiva que impulsará el crecimiento mundial de los dividendos en 1,1 puntos porcentuales este año. Estas empresas están siguiendo un camino trillado por las industrias de crecimiento durante los dos últimos siglos, alcanzando un punto de madurez en el que los dividendos son una vía natural para devolver el excedente de efectivo a los accionistas. Al hacerlo, han confundido a los escépticos que decían que este grupo de empresas era diferente. El mercado bursátil simplemente evoluciona con el tiempo, a medida que las industrias suben y bajan a medida que satisfacen las necesidades cambiantes de la sociedad. Pagar dividendos también ampliará su atractivo para los inversores para quienes los dividendos son una parte vital de su estrategia de inversión y también puede animar a más empresas a seguir su ejemplo.»