- Presenta aspectos que es conveniente considerar para garantizar que ninguna persona con discapacidad quede excluida de o en la escuela.
- Son estrategias dirigidas a las comunidades escolares de educación básica y media superior del país.
- Responden a un enfoque de educación inclusiva. Pueden consultarse en:
ideas-clave.pdf (mejoredu.gob.mx)
La Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu) puso a disposición de las comunidades escolares de educación básica y media superior del país la publicación “Ideas clave para favorecer la participación de personas con discapacidad en entornos escolares”.
A través de este material, esta Comisión ofrece orientaciones para contribuir a reducir algunas de las barreras que personas con discapacidad —estudiantes, docentes, personal administrativo y familias— puedan enfrentar en los entornos escolares.
Forman parte de la serie ¡Hagamos Comunidad!, y refieren a aspectos que es conveniente tomar en cuenta para garantizar que ninguna persona con discapacidad quede excluida de la participación en los entornos escolares, mediante el reconocimiento de la diversidad de formas de ser, estar, participar, aprender y hacer en la escuela.
Son estrategias que responden a un enfoque de educación inclusiva y se presentan como orientaciones concretas, sencillas y fáciles, que apoyan la transformación progresiva de las prácticas, las políticas y la cultura escolar.
Este material presenta siete ideas clave: actuar desde un marco de derechos y de educación inclusiva; garantizar un trato digno entre todas las personas de la comunidad; asegurar que los espacios sean accesibles; garantizar que todos los espacios sean seguros; construir ambientes que favorezcan la participación de toda la comunidad escolar; diseñar la enseñanza para que cada estudiante participe y aprenda, y pensar la inclusión como un compromiso colectivo.
“Ideas clave para favorecer la participación de personas con discapacidad en entornos escolares” promueve que en las escuelas todas las personas se sientan reconocidas, escuchadas, valoradas, respetadas y motivadas para participar en cualquier ámbito de la vida escolar, y generar vínculos sociales y afectivos que les permitan construir un sentido de comunidad.
Finalmente, cabe destacar que en su elaboración se consideraron, entre otras fuentes, las voces de colectivos e instancias dedicadas a la atención educativa de personas con discapacidad, experiencias de distintas comunidades escolares en la construcción de ambientes inclusivos, y las contribuciones de docentes y personas que viven con alguna condición de discapacidad, así como con sus familiares.