Por Marien Garza, Miembro del Consejo Consultor de Nutriólogos de Herbalife
Para poder empezar a hablar de movimiento quiero definir su antónimo; sedentarismo: un estilo de vida carente de movimiento o actividad física. La Organización Mundial de la Salud (OMS) define como sedentaria a aquella persona que realiza menos de noventa minutos de actividad física semanal para la salud.
La Real Academia Española, define como sedentario a aquel que trabaja sentado y es lo opuesto al nómada.
Los beneficios de hacer actividad física, ejercicio o practicar algún deporte han sido estudiados y documentados científicamente con evidencia positiva. Sin embargo, sigue siendo un reto para muchas personas el llevarlo a cabo. Por eso hoy he decidido poner sobre líneas la idea de solamente moverme más. Quiero retarnos a disminuir el tiempo que pasamos sentados, acostados o sin movimiento.
Cada vez hay más evidencia de la importancia de reducir el tiempo que pasamos sentados, para poder estar activos y tener beneficios en la salud.
El día para todos tiene las mismas 24 horas. Imagina a aquella persona que hace una hora diaria de gimnasio y las otras 23 horas al día, está sentado frente a la computadora trabajando, acostado viendo la tele, se traslada en automóvil por largos periodos de tiempo y la mayor parte de su vida la vive sentado.
Ahora visualiza a otra persona que no va al gimnasio, pero que en su día a día trabaja de pie, se traslada a través de una bicicleta a su trabajo, le gusta hacer jardinería y vive la mayor parte de su día en constante movimiento.
¿Quién piensas que sumará más puntos positivos a su vida para tener salud y bienestar?
El primer paso importante es que busquemos ser conscientes de cuánto tiempo pasamos sentados/ inactivos/ sedentarios cada día.
Entonces podremos empezar a encontrar maneras de sentarnos menos durante el día y de interrumpir los períodos prolongados de inactividad y sedentarismo.
Se me ocurren aquí algunas ideas para poder poner en práctica:
- Por cada hora sentado, ponte de pie y camina 3 minutos.
- Caminar 5 a 10 minutos después del desayuno, comida o cena.
- Subir las escaleras en vez de usar el elevador.
- Probar usar un podómetro o contador de pasos, para registrar nuestros pasos al día y poco a poco ir sumando más movimiento.
- Intentar reducir parte del tiempo que pasamos frente a la televisión y mejor dar un paseo.
Movernos y caminar es una excelente manera de relajarnos y descansar, y puede llevarnos en un futuro no lejano, a pensar en la idea de aumentar el movimiento por el simple hecho de sentirnos mejor y vivir mejor.