Ingresó al HGR 251, por un dolor abdominal
David es un niño de 8 años a quien le gustan los dibujos animados de Dragon Ball Z, de grande anhela ser policía y hoy tiene la oportunidad de cumplirlo, después de haber estado ocho días internado a causa del COVID-19.
El pasado 14 de junio, ingresó al Hospital General Regional (HGR) No. 251 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en el Estado de México Poniente debido a un fuerte dolor abdominal y presencia de fiebre.
Ante los síntomas iniciales, el personal médico pensó que se trataba de una afección de tipo estomacal.
Sin embargo, la presencia de fiebre, mal estado general, irritación en la piel y la posterior dificultad para respirar, les alertaron sobre la posibilidad de que padeciera COVID-19, por lo que decidieron realizar más estudios, que sirvieron para confirmar sus sospechas.
“Afortunadamente la evolución de David fue muy satisfactoria, se mantuvo con oxígeno suplementario con mascarilla y manejo con medicamento. El 20 de junio se logra su egreso en óptimas condiciones, con 95 por ciento de saturación y sin el apoyo de oxígeno”, así lo explicó el doctor Roberto Carlos Padilla Valdéz, pediatra del HGR No. 251.
El especialista del IMSS señala las complicaciones de diagnosticar a un menor: “la presencia de SARS-CoV-2 en pediátricos es inespecífica, los casos a nivel mundial nos han enseñado que la evolucion de éstos no es predecible, tener un paciente como David nos ayuda a diagnosticar casos más complicados que no presentan una sintomatología habitual o de pacientes de edades tempranas, como los lactantes, que no pueden expresar sus síntomas”.
Señala la gran satisfacción que le provoca el egreso de un niño pues representa el fin de la angustia compartida con los padres y a su vez, es el objetivo cumplido de todo el personal que participa en la atención. Agrega que, durante las próximas semanas, a través de diversas disciplinas, se vigilará, la dieta, tratamiento médico y evolución de David en su domicilio, todo para garantizar que se encuentre bien.
El médico exhorta a los padres de familia a mantener los cuidados necesarios para evitar que otros pequeños terminen enfermos “escuchemos las indicaciones de las autoridades sanitarias, cuidémonos y ante la presencia de sintomatología hay que acudir a una institución de salud”.
Por su parte, la madre de David, lo describe como un niño muy alegre, y querido en su familia, es el menor de tres hermanos, quien además destaca por su disposición para ayudar en los quehaceres del hogar, así como su inteligencia ya que por dos años consecutivos ha obtenido diplomas por su buen desempeño escolar.
“Estamos bien agradecidos, estoy feliz porque me lo llevo, es un día especial para nosotros, más para su papá porque es Día del Padre, no hay mejor regalo que ese, lo que queremos es tenerlo en casa, decirle todo el amor que le tenemos. Gracias a todos los doctores, a las enfermeras, a todo el personal del hospital, cada uno tiene su función, ellos siguen con su labor sin miedo”, expresó la señora.
El papá de David recibe como regalo del Día del Padre el poder llevarse a su hijo a casa, ya que, a pesar de tomar las medidas necesarias de cuidado, les tocó pasar por este dificil momento: “yo le digo a todas las familias que esten atentas a los síntomas que adviertan que algo esta pasando”.
“Aquí me lo valoraron, lo sacaron adelante y al personal de salud le digo que le echen muchas ganas como lo hicieron con mi hijo, es algo fuerte para ellos porque se encariñan con los pacientes que llegan. Ellos tienen mucha fuerza de voluntad y les agradezco todo eso, que son muy fuertes y a pesar del riesgo en el que están, son muy fuertes”, concluye el padre del pequeño.
“Es un esfuerzo de todos, tanto de la familia como del personal, la vocación de servir, es lo que nos tiene aquí,” concluye la licenciada Tania Arizmendi, Trabajadora de Social encargada de acompañar a David y a su familia a la salida del hospital.
