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El título de este escrito ‘No hay pan para tanto chorizo’ fue una de las frases más icónicas del movimiento de los indignados del 15M-2011, movimiento ciudadano de acampada en diferentes ciudades españolas y mundiales, y que, en Barcelona duró 46 días, ya que el 30 de junio la guardia urbana desalojó la acampada en la plaça de Catalunya. Y he adoptado ese título, pues estoy convencido de que la situación actual, con diferentes matices, es igualmente problemática, con idénticos o similares ‘chorizos’, como explico a continuación.
Los grandes problemas del 2011 siguen en la actualidad, ya que son estructurales, pues el problema de la vivienda, el paternalismo machista, los derechos de los inmigrantes, la violencia institucional (policial, judicial) etc., continúan dificultando la vida de muchos ciudadanos. Pero, el principal partido político que emergió, Podemos, como los principales movimientos: No vull pagar, Iaioflautas, Stop Deshaucios, Partit X, etc., se fueron diluyendo, como cualquier azucarillo, o están en vías de desaparición. El caso de Podemos es digno de estudio, pues al acercarse al poder, perdió ‘la chispa’, perdió su espíritu de ‘Carolina Reaper’, (el pimiento más picante del mundo, según el libro Guinness) y ahora ha pasado a ser un simple comodín más, y han pasado a ser parte del problema. Por eso, también siguen siendo igualmente válidos otros lemas del 15M: ‘no nos representan’, ‘no nos sentimos representados’.
Y por eso me parece digno de mención cualquier tipo de acto de rebeldía, de protesta, como el que efectuó el cineasta Pedro Almodóvar, que ya reproduje; y, en esa línea, ayer me llegó por las redes, el comentario efectuado por el cantante, guitarrista y compositor de rock estadounidense Bruce Frederick Joseph Springsteen, conocido como The Boss. Y ambos comentarios críticos, contra Donald Trump, requieren una notable valentía.
El comentario de Bruce Springsteen, durante el espectáculo en el Co-Op Live de Manchester (Reino Unido, el pasado 14 de mayo), que grabará en un disco en directo de la actual gira ‘Land of hope and dreams’ (tierra de esperanza y sueños), incluyendo sus críticas a Trump, fue el siguiente:
‘Sobre la administración de Trump, corrupta, incompetente y traidora: En mi casa, la América que quiero, la América que he escrito sobre ella y ha sido un faro de esperanza y libertad durante 250 años, actualmente está en manos de una administración corrupta, incompetente y traidora. Esta noche pedimos a todos los que creen en la democracia y en lo mejor de nuestra experiencia americana de levantarse con nosotros. Levantad la voz contra el autoritarismo y que resuene la libertad. Persiguen a personas por hacer servir su derecho a la libertad de expresión y a expresar su discrepancia. Esto está pasando ahora. En América, los hombres más ricos están satisfechos de abandonar los niños más pobres del mundo a la enfermedad y la muerte. Esto está pasando ahora, y en mi país, se están complaciendo sádicamente con el dolor que infligen a los trabajadores americanos leales. Están reculando la legislación que nos llevó a una sociedad más justa y plural. Están abandonando a nuestros grandes aliados y poniéndose del lado de los dictadores contra los que luchan. Están desfinanciando las universidades americanas que no se inclinan ante su demanda ideológica. Están expulsando residentes de las calles americanas y sin el debido proceso legal los están deportando a centros de detención de extranjeros y prisiones. La mayoría de nuestros representantes electos no han conseguido proteger el pueblo americano de los abusos de un presidente incompetente y de un gobierno deshonesto. No tienen ninguna preocupación ni idea de lo que significa ser profundamente americano. La América que os he cantado durante 50 años es real, e independientemente de sus defectos, es un gran país con una gran gente. Así sobreviviremos a este momento. Ahora tengo la esperanza porque creo en la verdad de lo que dijo el gran escritor americano James Baldwin. Dijo que en este mundo no hay tanta humanidad como querríamos, pero hay suficiente. Recemos.’
‘Efectivamente, la enemistad entre Springsteen, votante declarado del Partido Demócrata, y Trump, viene de lejos, pues ya en el 2016, el cantante exigió a Trump, que en sus mítines dejara de sonar su lema ‘Born in the USA’, y en su primer mandato lanzó ‘That’s what makes us great’ (eso es lo que nos hace grandes), en la que se refería a Trump como un ‘timador’. Trump, desde la presidencia, contestó a través de Truth Social, llamándolo ‘imbécil prepotente, tono como una piedra y rockero reseco’, y lo incluyó en una lista de estrellas ‘artistas antipatriotas, como Springsteen, Beyoncé o Taylor Swift’’ a las que acusó de ‘hacer contribuciones potencialmente ilegales’ a la candidatura de Kamala Harris, ‘por lo que pidió una investigación sobre este asunto. Los candidatos no pueden pagar por apoyo, que es lo que hizo Kamala, con el pretexto de pagar por entretenimiento’’.
(Efe.com)
Volviendo a los mencionados lemas del 15M, siguen siendo válidos: ‘No hay pan para tanto chorizo’ y ‘No nos representan’, pues personajes como Trump abundan en todos los estados; y en el reino español parece que son una plaga, una pandemia.
Estos días lo hemos visto claramente con la vergonzante actuación del PP y Vox con su campaña contra el reconocimiento del catalán, euskera y gallego en las instituciones europeas. Y es vergonzoso, también, que al menos 10 países de la UE (Alemania, Finlandia, Croacia, Suecia, Austria, Italia, etc.) hayan pedido más tiempo al gobierno español, para recabar más informes jurídicos, pues ven demasiado prematura la incorporación de esas tres lenguas. Es decir, al final, ante esta situación, el gobierno de Pedro Sánchez ha decidido retirar la propuesta de votación, repitiéndose la jugada del 2023. En definitiva, la victoria de la cínica ‘buRRocracia’.
La campaña del PP es catalanofóbica, como sabemos, y no lo ocultan, pues su ‘argumento’ es que fue una exigencia de Carles Puigdemont (para la investidura de la presidenta del congreso), que incluía las otras dos lenguas cooficiales (gallego y euskera) también en el congreso y senado, como así fue.
Y que esa campaña en la UE la encabece la impresentable y trumpista catalana Dolors Montserrat Montserrat, vicepresidenta del PP europeo, ya es para ‘mear y no echar gota’. Nada nuevo, Mariano Rajoy, hace quince años hizo una campaña pidiendo firmas contra el Estatut de Catalunya, que el líder del PP catalán, Josep Piqué asumió acríticamente, mostrando, así, su mentalidad colonizadora, ya que en el imaginario del frustrado imperio español sigue imperando la sacrosanta unidad en todos los ámbitos.
Asimismo, Pedro Sánchez (y el PSOE) que tienen, asimismo, ese ADN mental colonialista, se ha movido en favor del reconocimiento de esas tres lenguas, pero lo ha hecho al sentirse obligado, para poder configurar su presidencia de la actual legislación. Pero está claro que no se ha empleado a fondo, como sí que hizo para conseguir el nombramiento de Teresa Ribera como vicepresidenta ejecutiva de la comisión europea, pues para eso, sí que pactó con Giorgia Miloni, la jefa del gobierno italiano, que ha sido la gran coordinadora y avaladora de los países que se han mostrado contrarios al reconocimiento del catalán.
En la sesión de la UE, desde ayer se sabía que el ministro de exteriores español, José Manuel Álvarez, no ha asistiría, ‘tenía otros compromisos’; es evidente que nadie quiere tener una fotografía como perdedor. Pero me parece claro que su presencia, forzando reuniones previas con los negacionistas, hubiera podido ser una labor positiva.
Sea como sea, Pedro Sánchez, incumpliendo sus compromisos: la amnistía (complicada al no querer incorporar la malversación, que, como hemos visto, ha sido la gran ventana de oportunidad que ha tomado el poder judicial), la transferencia del control de la inmigración, la financiación singular de Catalunya y ahora, el reconocimiento del catalán, son una clara muestra de que es un verdadero tahúr, que promete lo que le exigen y después no cumple, o no apuesta fuerte para su cumplimiento. Pedro Sánchez podría apostar fuerte, con la baza del incremento del gasto en armamento (mal denominado ‘defensa’), pero no se ha atrevido, o no le ha interesado o convenido.
Y aún así, a Pedro Sánchez todo le ha salido redondo, pues sigue en su poltrona y, en el caso del reconocimiento del catalán en las instituciones europeas, ahora, encima, puede sacar una mejor tajada, culpando al PP por su campaña anticatalana. Y eso, siendo cierto, será utilizado hasta el infinito por parte de Sánchez y todo el PSOE. Aunque ese ‘argumento’ no sea muy consistente entre los nacionalistas españoles, incluidos los catalanes con esa mentalidad metropolitana respecto a sus colonias, pues, como sabemos, atacar a Catalunya y lo que representa, siempre les da réditos, votos.
Por todo esto, me parece que es pertinente acabar este escrito reproduciendo la canción ‘Llençat’ (lánzate), del 2008, del grupo Lax’n’Busto:
‘Lánzate
Caes al suelo muy abajo
crees que no saldrás de ahí
pero con los meses te das cuenta
que vuelves a empezar
y a fuerza de caer mucho
y de levantarte de nuevo
ves que las cosas no cambian
pero ya no eres quien eras antes
pues he sido ya cinco o seis
y soy lo que ahora tengo
no quiero pensar en lo que llegará mañana.
Lánzate, cada instante es único
no se repetirá
siento que el corazón no deja de latir
y dice que me lance
que no piense en todo lo que vendrá
que un lápiz nunca dibuja sin una mano.
Y porque mis pensamientos
que siempre viven el presente
no conjugan otros tiempos que
‘el ya haré’ lo que no hice
pues hoy o tal vez mañana
estaré aquí o estaré por allá
seré un pedazo del universo
que no note el paso del tiempo
lo que hago en cada instante es
la fuerza que me hace grande
no quiero pensar en lo que llegará mañana.
Lánzate, cada instante es único
no se repetirá
siento que el corazón no deja de latir
y dice que me lance
que no piense en todo lo que vendrá
que un lápiz nunca dibuja sin una mano.
Tengo claro que los independentistas catalanes debemos lanzarnos, no podemos transigir más tiempo el actual status quo, que se inició en 1714, y que lleva impuesto 311 años. Y, como dice la canción, ‘un lápiz nunca dibuja sin una mano’, así que nuestras manos deben ser una de las manos que se levanten, que se lancen. No hay otra.