- La especialista Raquel Duque Vargas sugirió escucharlos con todos sus sentidos y tomar en cuenta sus opiniones.
Toluca, Estado de México, 2 de enero de 2023.- La comunicación entre madres, padres, hijos e hijas debe ser franca y afectiva, para la cual se requiere conciencia y práctica continua, sin juicios, sin mentiras, sin amenazas y sin tratar de controlarlos usando el sentimiento de culpa; y aunque es difícil, deben hacer el esfuerzo para conseguirlo, aseguró la especialista en psicología, Raquel Duque Vargas.
En la videoconferencia organizada por la Unidad de Igualdad y Erradicación de la Violencia, de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (CODHEM), la especialista precisó que la comunicación efectiva se requiere en cualquier relación entre las personas, sin embargo, es tener apertura y confianza con los hijos, pues si se comunican de manera abierta, los hijos aprenden a ser así.
Duque Vargas explicó que cada hijo es diferente y tiene su propia personalidad, por tanto, se debe buscar la mejor manera de hablar con ellos, de acuerdo a su forma de ser; además, la comunicación abierta y afectiva se logra cuando padres y madres están dispuestos a platicar, escuchar y contestar preguntas de infantes o hijos adolescentes.
Deben comunicarse al nivel de niños y niñas, usar un lenguaje apropiado a la edad que tienen para que puedan entender el mensaje, involucrarse en su mundo y sobre todo, aprender a escucharlos con todos los sentidos, para lo cual dio algunos tips: mantener el contacto visual, eliminar distractores, no interrumpirlos, y hacerles saber que han sido escuchados; de lo contrario, pensarán que no les importa lo que les dicen.
La especialista sugirió tener conversaciones breves sobre determinados temas, de no más de 30 segundos y preguntarles si tienen algún comentario o cuál es su inquietud o duda, para ver si entendieron el mensaje; en lugar de enojarse o regañarlos cuando no sea así, relajarse y pedir su opinión.
Precisó que una cosa es expresar opiniones y otra hacer juicios; subrayó que expresar ideas permite transmitir valores, por eso, los padres deben admitir cuando no tienen conocimiento sobre algún tema, pues incluso eso puede generar la inquietud en ambas partes de investigar, colaborar y compartir conocimientos.
Indicó que, durante los conflictos, padres y madres deben resolver un problema a la vez, es decir, ver qué es lo más importante para solucionar o lo más fácil, pedir sugerencias a todos los integrantes de la familia, buscar maneras creativas y llegar a un acuerdo; esto sin duda ayuda a las y los hijos, porque ayuda en su agilidad mental y raciocinio, aprenden a identificar las situaciones de riesgo y la manera en que pueden resolverlas.
Ser cortés durante los conflictos es fundamental, ya que las y los adultos deben tratar con respeto a hijos e hijas de cualquier edad, aprender a identificar patrones cuando los infantes o adolescentes están molestos para evitar agrandar el problema, no ser groseros ni mal intencionados; utilizar mensajes con la palabra “Yo” poniendo ejemplos en primera persona, a fin de crear un espejo de acciones que genere corresponsabilidad, evitar ofenderlos y humillarlos, además de fomentar el perdón.
La psicóloga dijo que para no caer en comunicación negativa se deben evitar los sermones y la repetición de algo que ya les han dicho de manera constante, de lo contrario, se fastidiarán y hasta pueden dejarlos hablando solos; tampoco los deben interrumpir, hacerles críticas a sus sentimientos, opiniones o ideas, porque lo percibirán como un ataque; ni mencionar una y otra vez malas experiencias del pasado, solo hacer referencia a las consecuencias que pueden traer consigo determinadas acciones.