Últimamente es fácil observable que de cada vez afloran más autonomistas, falsos independentistas en su momento, que ahora se están sacando la máscara, como explico a continuación.
Cada día más, me cae la cara de vergüenza que el diario al que estoy suscrito, el Ara, esté siguiendo el juego a los unionistas. Como ejemplo, es indignante leer el ‘pensamiento’ de Esher Vera i García, directora de ese medio de comunicación desde que el año 2016, y constatar cada día, el giro partidista pro ERC (pro autonomismo), supongo que todo se compra, las subvenciones tienen ese objetivo.
Sé que el siguiente comentario es indigno, pero si se tratase de un político o de un ‘influencer’ unionista, no lo ocultaríamos, y estoy convencido de que tampoco debemos ocultarlo en este caso, y es que, según las redes sociales, el esposo de Vera, natural de Palencia, es A. M. B., un policía nacional. Con esto sólo señalo una evidencia objetiva, que, estoy convencido, no tiene influencia alguna en el pensamiento de Vera; e, igualmente, no quiero presuponer, tampoco, el pensamiento de ese señor.
Cómo encuentro a faltar al primer director y cofundador del Ara, Carles Capdevila i Plandiura (1965 – 2017), una persona de profundas ideas y convicciones independentistas, y, lo que es más importante, ética y transparente, sin las dobleces actuales.
Así, en su editorial de hoy, 10 de marzo, titulada ‘De qué ha servido’, hace un repaso a los años desde el 2017 (referéndum), señalando que ‘En Catalunya, la amnistía, como en su momento los indultos, pone punto final a un cierto secuestro emocional. Muchos ciudadanos que han estado condicionados por el exilio y la cárcel tienen más derecho que nunca a exigir un rendimiento de cuentas. Una exigencia perfectamente compatible con la satisfacción de saber que la expresión de la disidencia legítima y democrática no serán represaliadas’.
Y sigue su editorial, planteando sus argumentos con los siguientes subtítulos: ‘De oca a oca’ y ‘El bucle sin final’.
Yo creo que esa directora se equivoca totalmente, ya que el ‘secuestro emocional’ sigue plenamente vigente, pues la ciudadanía votamos el 1 de octubre del 2017, y seguimos viendo que nuestra decisión fue machacada por los poderes del estado, y eso, para muchos, no merece ni el olvido ni el perdón.
Y si seguimos de ‘oca a oca’ en un bucle infernal, es debido, precisamente, a la represión, que ni los indultos, ni la ¿futura? amnistía (limitada a 372 casos, según el monosabio Félix Bolaños, ministro de la presidencia y de justicia de Pedro Sánchez) no será general, por lo que quedarán muchos cientos al margen de esa amnistía (CDR’s, e, incluso, con toda seguridad, el propio president Carles Puigdemont.
En esta línea de desvelar a esas personas que, ahora, se consideran autonomistas de toda la vida, el medio digital ‘Octuvre’ de Albano Dante Fachín Pozzi y de su esposa Marta Sibina i Camps, en su publicación de ayer (https://mailchi.mp/octuvre/nyt) explican las ‘intervenciones’ de Michael Schwirtz y José Antonio Bautista, que, desde el primer momento dieron credibilidad a las ‘fake new’ sobre la incidencia y contactos de Junts con espías rusos, basándose en un pseudo informe confidencial anónimo de la guardia civil; ‘fake new’ que, acríticamente, incluso el New York Times publicó, señalando, incluso, el ofrecimiento de 10.000 soldados rusos.
Y, como señala Octuvre, además de las lógicas editoriales de todos los medios unionistas (españolistas) en Catalunya, el primer ‘político’ que se hizo eco de ese ‘fake new’, fue, como no, Oriol Junqueras (ERC), que, el 10 de setiembre del 2021, dijo que ‘ve un grave error la conexión de Puigdemont con Rusia’, y, el Ara: ‘El New York Times profundiza en los presuntos vínculos entre el entorno de Puigdemont y Rusia’, e, igualmente hicieron y siguen haciendo Nació Digital, El Periódico, etc., todos ellos medios catalanes.
El pasado 2 de diciembre, según siguen informando Dante y Marta, ‘la Comisión Europea respondió a una pregunta efectuad por Puigdemont, Ponsatí y Comín, sobre el supuesto informe de ‘inteligencia europea’ del que hablaba el NYT, y esa respuesta fue:
(…) La cuestión es que la única ‘inteligencia europea’ es un organismo que se llama EU INTCEN, y la respuesta fue clara: ‘La EU INTCEN no es el autor del informe de inteligencia mencionado en el artículo del NYT. EU INTCEN no sabe quien ha sido el autor del informe en cuestión’.
Dante y Marta añaden: ‘Es imprescindible denunciar el seguidismo acrítico de la prensa catalana híper subvencionada por el Gobierno de la Generalitat. En lugar de pedir explicaciones a los autores de la noticia, en lugar de fiscalizar el trabajo de Schwirtz y Bautista, prefirieron dar por buena la ‘investigación’ y reproducir el discurso dictado por Junqueras y el Gobierno catalán.
(…) El mismo día que el NYT publicó esa ‘información’, David Miró, subdirector del diario Ara, publicó: ‘El NYT publica este viernes una información altamente nociva para el independentismo catalán, como son los intentos de personas próximas a Carles Puigdemont para establecer contactos con el Kremlin (…) La diplomacia catalana tendrá ahora mucho trabajo para limpiar el impacto que tiene ver en el NYT un titular con las palabras ‘Catalonia i Kremlin juntes’.
Y este mismo lunes, dos años más tarde, en el Parlament de Catalunya, la consejera de exteriores Meritxell Serret dijo: Si Junts priorizase el país, no tendríamos desde exteriores el trabajo que estamos teniendo para convencer a nuestros aliados y a los medios internacionales que en Catalunya no tenemos ningún interés con el Kremlin’.
Ya es difícil saber si el Gobierno catalán escribe los artículos del Ara, o si el Ara escribe los discursos de los miembros del Gobierno (…)’
Como vemos, en Catalunya hay muchos políticos y medios rendidos y subordinados al estado español, y así nos va. Unos ‘trabajan’ aplicando diferentes medios, y otros, más cortos y primarios, como Gabriel Rufián (ERC)’, haciendo honor a su apellido, el 12 de junio del 2022, llamó ‘tarado’ a Puigemont (Alex Tort, La Vanguardia), y en marzo de ese mismo año, había calificado a los exiliados de Junts, diciendo que ‘son unos señoritos que se creen James Bond’.
En definitiva, viendo el actual panorama, y enlazando con la editorial de hoy de Esther Vera en el Ara, no hemos puesto punto final al ‘secuestro emocional’, pero a éste se ha añadido el pesar por el secuestro ‘partidista’ de esos muchos falsos independentistas, unos vividores del ‘carpe diem’, que gozan de todas las prebendas del tradicional autonomismo.
Y Vera, nos dice que ‘Muchos ciudadanos que han estado condicionados por el exilio y la cárcel tienen más derecho que nunca a exigir un rendimiento de cuentas. Una exigencia perfectamente compatible con la satisfacción de saber que la expresión de la disidencia legítima y democrática no serán represaliadas’; pues bien, yo creo que efectivamente tenemos derecho a exigir un rendimiento de cuentas, pero a todos esos falsos independentistas, desde Oriol Junqueras, hasta el Ara, pues es la mejor manera para salir del ‘oca a oca’ y del ‘bucle sin final’.
Siempre será más positivo para el colectivo independentista, saber que en realidad somos muchos menos que en el 2017, pero, más unidos, éticos y morales. Siempre es más positivo conocer la dura realidad, que seguir engañados por esos autonomistas.
Estamos cansados de la ‘conllevancia’ de José Ortega y Gasset (1883 – 1955) en su discurso en el congreso de diputados en mayo del 1932, en el debate sobre el estatut de Catalunya, en el que defendió que tanto el estado español como los autonomistas catalanes, acepten soportar la actual situación penosa y molesta. En ese discurso de hace más de 90 años, Ortega y Gasset dijo:
‘El problema catalán no es uno que se pueda solucionar, es uno que hay que conllevar. Catalunya siempre contará con un porcentaje significativo de sus ciudadanos que deseen la independencia; España nunca podrá concedérsela sin dejar de ser España. Habrá, pues, que conllevarse democrática y pacíficamente durante una larga singladura común, será engorroso, si, pero no necesariamente letal’.
Pero sabemos que esa conllevancia aplicada, no es ni democrática ni pacífica, pues cada año vemos que nos expolian, que nos maltratan, que nos insultan, que nos desprecian.
Y a eso parece que se han avenido muchos antiguos ‘independentistas’ pero, afortunadamente, otros muchos más, no nos rendiremos.