- Este padecimiento afecta los órganos de las vías respiratorias: nariz, oídos, ojos, bronquios y garganta; es causado por alergia a alguna sustancia que se inhala como ácaros del polvo, pólenes diversos, hongos y epitelios de animales.
La rinitis alérgica comienza con escurrimiento y flujo nasal; puede afectar los órganos de las vías respiratorias: nariz, oídos, ojos, bronquios y garganta, donde puede ser muy peculiar, ya que el paciente puede estar toda la vida con resequedad e irritación, afirmó la coordinadora auxiliar de Servicios de Prevención y Promoción de la Salud del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Estado de México Oriente, médica Trinidad Sánchez Ramírez.
Indicó que la rinitis es causada por alergia a alguna sustancia que se inhala: ácaros del polvo, pólenes diversos, hongos, epitelios de animales o sustancias manejadas en el trabajo. La rinitis alérgica puede ser estacional o continua. La estacional es producida por el polen.
La especialista subrayó que es importante que se ponga atención a los primeros síntomas, en particular en aquellos niños que se enferman a cada rato y continuamente están con el médico por fluido nasal y tos, porque son los primeros indicios de que finalmente pueda padecer rinitis alérgica.
La rinitis alérgica es un padecimiento predispuesto en nuestro organismo desde que nacemos. Hay diferentes etapas donde puede estimularse: desde lactantes antes del año, que habitualmente son las más severas, hasta en los adultos de 50 y 60 años.
La especialista explicó que para saber cuáles son los primeros síntomas, por lo general las y los niños empiezan manifestando gripes constantes de tres y cuatro días, con el moco persistente y cristalino, además de estornudos seguidos de hasta diez veces y frotamiento continuo de la nariz.
“Cuando la mucosidad se torna verdosa, amarillenta o que comienza a cambiar la coloración, estamos ante una infección o puede ser una sinusitis franca, que afecta la cabeza, oídos, garganta, ojos y la cara”, señaló.
En cuanto al diagnóstico, explicó que se hacen pruebas cutáneas (en la piel) en las y los niños y en los adultos para saber con exactitud qué es lo que realmente desencadena al paciente la alergia, que puede ser desde polvo, aromatizantes, desodorantes, el contacto con animales domésticos, pasto y plantas, entre otros, y de ahí se establece la vacuna que se le va a aplicar en el tratamiento.
“No minimicen cualquier tipo de gripa, catarro, atiéndase de inmediato para poder identificar de manera oportuna la rinitis alérgica y tratarla a tiempo”, puntualizó la especialista.
Recomendó evitar aromatizantes de olor penetrante, muñecos de peluche, animales domésticos, tapetes, alfombras, plantas, entre otros, porque “hay cosas que con el tratamiento las podemos medio controlar, pero hay otras que no podemos modificar, como el clima, el polvo casero que es inevitable”, concluyó.
