Hace dos años, el concepto de éxito para las empresas de tecnología se veía muy distinto al actual. Las organizaciones están retomando los proyectos de transformación digital que se pusieron en pausa durante la pandemia y, por ello, necesitan garantizar que cuentan con una conectividad sólida y medidas de seguridad adecuadas para seguir adelante.
Hoy las empresas están trabajando para pasar de operar en “modo supervivencia (pandémica)” a “modo de crecimiento constante”, lo cual implica una mejor estrategia y mayor inversión en sus capacidades digitales y de seguridad.
Para esto, AT&T recomienda reflexionar sobre los siguientes puntos:
¿Nuestra fuerza laboral tiene la conectividad necesaria para llevar a cabo sus funciones de manera efectiva?
El soporte de cualquier empresa es su red, al final, es lo que nos permite hacer nuestro trabajo. Durante la pandemia, tecnologías como las redes privadas virtuales, o VPN, y la nube ayudaron a conectar a los colaboradores con los sistemas y servidores, pero muchas empresas adoptaron un enfoque más bien reactivo frente al trabajo remoto debido a que no tenían la experiencia o los recursos necesarios para trazar una estrategia de trabajo híbrido a largo plazo.
Hoy 90% de las empresas globales planean expandir sus ecosistemas de negocios,[1] con lo cual las redes se expandirán como nunca. Pero cuidado: si la información crítica, aplicaciones y capacidades se encuentran alojadas en la nube, es esencial contar con una infraestructura de internet dedicado que habilite un rendimiento constante y estable que no dependa de un ancho de banda compartido con otros usuarios de internet.
¿Estamos maximizando y asegurando todas las relaciones dentro de mi ecosistema empresarial?
Las empresas no operan en una burbuja, forman parte de un ecosistema que incluye proveedores, vendedores, fabricantes, entre otros, que en conjunto colaboran, comparten fortalezas y alinean objetivos.
Una estrategia de seguridad y conectividad de red adecuada permite el crecimiento del ecosistema empresarial. No solo se trata de conectar a la fuerza laboral sino también de garantizar la comunicación y colaboración con socios y otros miembros del ecosistema.
¿De qué forma el crecimiento de la huella digital de nuestra organización la expondrá a más riesgos?
Expandir las capacidades digitales implica también abrir las posibilidades de riesgos cibernéticos. Al mover algunas operaciones fuera del lugar de trabajo o colaborar más estrechamente con otros miembros del ecosistema, la información podría estar más vulnerable.
La seguridad cibernética es una de las principales preocupaciones de los líderes empresariales. El riesgo de pérdida de ingresos debido al tiempo de inactividad o incluso el impacto en las relaciones con los clientes es real. En un entorno cada vez más competitivo, esto puede ser la diferencia entre el éxito o fracaso de una empresa.
En resumen, si la red y seguridad de tu empresa hoy se mantiene prácticamente igual que hace un año, tu capacidad para competir en podría verse impactada. Es indispensable que las organizaciones analicen a detalle su infraestructura de red y elementos de seguridad para asegurarse que cuentan con las herramientas y capacidades que las llevarán a conectarse de manera efectiva y segura, y seguir creciendo.
*Acerca de AT&T
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