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Remesas siguen sorprendiendo con niveles históricos

MONITOR ECONÓMICO

  • Economía creció 3.0% en 2022, más que lo esperado
  • En abril del año pasado, los analistas estimaban que México crecería 1.7% en 2022. Los buenos resultados del tercer y cuarto trimestre, mejores de lo esperado, permitieron que la economía lograra crecer 3.0% en el año. Sin considerar el 4.7% de 2021, que fue más bien un rebote aritmético, 2022 fue el mejor año desde el 3.3% de 2015.
  • A nivel de los tres grandes sectores, el desempeño fue el siguiente: 3.0% en el agropecuario, 3.2% en el industrial y 2.7% en los servicios.
  • Crecieron el consumo y la inversión, además de que repuntaron las exportaciones.
  • Para este año, se estima que el Producto Interno Bruto (PIB) crezca solo 1.1%, posiblemente con números muy bajos hacia el tercer trimestre, inclusive con cierta caída. Este bajo ritmo estaría inducido por un débil desempeño de Estados Unidos, con una tasa de apenas 0.4% en el año (encuesta de Banxico).
  • Así las cosas, durante los primeros cuatro años de esta administración, nuestra economía se contrajo 0.2% promedio anual, muy distante del +1.8% de EE.UU.
  • Cierto deterioro de las finanzas públicas en 2022
  • El gobierno estimaba un déficit fiscal de 3.0% del PIB para 2022. El resultado final fue de 3.4%. Sin ser mayúsculo, se trata del mayor déficit visto desde el -3.6% del PIB de 1989.
  • Históricamente, los peores déficits fiscales de México se dieron en los años ochenta, con hasta 11.1% del PIB en 1986 y 1987, siendo tiempos de grandes crisis que el país tuvo que enfrentar.
  • Se verán mayores déficits para 2023-2024, sin que ello represente un factor de riesgo para la economía. La Secretaría de Hacienda estima déficits de 3.6% para 2023 y 2.2% para 2024 y 2025.
  • El año pasado, los ingresos tributarios crecieron 2.5% real, compuesto por un repunte de 18.7% real en los ingresos petroleros, mismos que representaron 22.5% del total (su máxima proporción desde 2014), así como una reducción de 1.4% real en los ingresos no petroleros. Dentro de este último, los ingresos tributarios (pesan 58% de los ingresos totales) se cayeron 1.0% real, compuestos de la siguiente manera: ISR 11.0% real, IVA 0.8%, IEPS -72.7% y otros ingresos 24.8%.
  • Al final, los ingresos tributarios representaron en 2022 13.3% del PIB, observando un estancamiento relativo por varios años consecutivos.
  • Remesas siguen sorprendiendo con niveles históricos
  • Las remesas familiares ingresadas al país ascendieron a USD 58,497 millones en 2022, reportando un crecimiento de 13.4% en el año.
  • De esta manera, durante el periodo 2016-2022, estas remesas crecieron 13.2% promedio anual, un ritmo histórico para las cuentas externas del país. Durante esos siete años, el ingreso acumulado de divisas por este concepto ascendió a USD 278 mil millones. Una dinámica parecida de las remesas se había reportado durante 1996-2006 (11 años), con un crecimiento de 19.2% promedio anual.
  • En el último trimestre del año pasado, las remesas ya moderaban su ritmo, a 9.0% anual, su tasa más baja desde el segundo trimestre de 2020, aunque aún se trata de un buen ritmo.
  • Para este año, se estima un crecimiento de solo 7.5%, considerando la desaceleración de la economía de Estados Unidos. De cualquier forma, las remesas siguen siendo hoy una de las principales fuentes de divisas a la economía, representando el año pasado 4.1% del PIB, su máximo histórico.
  • Desempeño mixto del crédito durante 2022
  • El año pasado, lo dominante de la economía fueron las fuertes alzas en las tasas de interés y de la inflación. A pesar de esto, la economía logró crecer 3.0%, una tasa aceptable y que superó las previsiones iniciales de los analistas.
  • En medio de todo esto, tras su desplome de 2021, el crédito empezó a cambiar de dirección y logró avanzar al menos 1.4% real durante el balance anual 2022. Visto en la coyuntura, en diciembre ya reportaba un 4.1% real anual, lo que significa una tasa aceptable, logrando sortear un entorno inflacionario y de tasas muy complejo. Esta pequeña recuperación deja a esta administración en una mala posición para el crédito, con una caída de 0.6% real promedio anual durante 2019-2022, que se compara contra el 6.8% anual de toda la administración de Enrique Peña Nieto (2013-2018) y el 8.1% de Felipe Calderón (2007-2012).
  • Hay algunos problemas en el portafolio comercial, ya que en 2022 solo creció 0.3% real, muy marginal si consideramos su desplome de 12.3% de 2021. En diciembre avanzaba 3.3% real anual, estimándose que podría crecer 3.5% en este año y 6.6% en 2024. Si así fuera, su nivel de 2024 aún estaría casi 3% por debajo de 2020, lo que significa que saldría de esta situación solo hacia el año 2025. Se necesita que este portafolio crezca a tasas elevadas, a fin de que se traduzca en inversiones y en una mayor actividad productiva.
  • El portafolio comercial pesa 63.9% del total y ha perdido algunos puntos en años recientes. El portafolio de consumo pesa alrededor de 16% del total y mantiene cierta constancia.
  • En cambio, el ganador está siendo el crédito hipotecario, que ha crecido de manera constante por 18 años consecutivos y promediando alrededor de 8.3% real anual durante 2005-2022. Su peso ha mejorado desde 14.2% en 2005 hasta 20.4% en 2022. La inercia del crédito total podría empujarlo a crecer 3.7% real en este año y rebotar un poco más en 2024 (6.0%).
  • Son tasas aún insuficientes, ya que, para que la inversión crezca 8% real y el PIB 4%, es necesario que el crédito lo haga por encima del 10% real anual. El reto para el crédito es de grandes dimensiones. Esto tendría que darse en línea con una cartera vencida que ahora se sostiene en niveles bajos, de solamente 2.2% en 2022, y con perspectivas positivas a mediano plazo. La cartera vencida no representa un gran riesgo para la economía.

MERCADOS FINANCIEROS

  • Reserva Federal eleva su tasa en 25 puntos base
  • Estaba prácticamente anunciado que la Fed de Estados Unidos subiría su tasa de referencia en 25 puntos base, y así ocurrió. Hoy, esta tasa se ubica en el rango oficial de 4.50% a 4.75%, y las expectativas siguen siendo al alza.
  • El mercado piensa que ésta se elevará dos veces más, una en marzo y la última en mayo, con 25 puntos base en ambos casos. De esta manera, la tasa terminal sería de 5.25%, a partir del cual se mantendría constante por un semestre, para que inicie su descenso hacia la parte final del año.
  • En este ciclo alcista de las tasas de la Fed, que inició en marzo de 2022, los movimientos han sido como sigue: uno de 25 puntos base el 16 de marzo de 2022, seguido de un aumento de 50 pb, para luego intensificarse con cuatro aumentos consecutivos de 75 puntos. Esto último en circunstancias en que la inflación se había elevado hasta su máximo de 9.1% en junio del año pasado.
  • Ante el descenso de la inflación, que bajó hasta 6.5% anual en diciembre, la Fed reacciona moderando su ritmo de aumentos: a 50 pb el 14 de diciembre y a 25 pb en 1° de febrero. Si la economía de Estados Unidos ingresara a un periodo recesivo hacia el tercer trimestre de este año, la Fed respondería en diciembre con su primer descenso en tasas, posiblemente de 25 pb. Las reducciones serían más intensas desde principios del próximo año, dependiendo de la magnitud de la recesión.

ECONOMÍA ESTATAL

  • Crédito al sector industrial
  • En el cuarto trimestre del año pasado, el crédito comercial nacional creció 3.1% real anual (excluye consumo e hipotecario), ligando tres trimestres con tasas positivas y dejando atrás siete trimestres a la baja. De esta manera, en 2022, el crédito nacional creció solamente 1.0% real, acumulando en lo que va del sexenio (2019-2022) una caída de 2.2% real promedio anual, lo que se compara contra el -0.2% real anual del PIB nacional de este periodo.
  • Detrás de los promedios confluyen desempeños muy diferenciados. Por un lado, el crédito a algunas entidades mostró ritmos elevados durante 2019-2022: Yucatán 10.4% real anual, Querétaro 9.1%, Aguascalientes 6.6%, entre otros. Por otro, entidades con caídas significativas en el crédito: Zacatecas -15.8%, Guerrero -11.0%, Morelos -10.3%, entre otros.
  • En 2022, el crédito comercial nacional de la banca múltiple representó 14.1% del PIB nacional, siendo una métrica que mide una vista parcial del grado de apalancamiento de la economía, ésta se mantiene algo estable por varios años consecutivos, como uno de los indicadores de la economía más rezagados a lo largo del tiempo.
  • A nivel estatal, por concentrar los grandes corporativos, la Ciudad de México representa 42.8% del crédito nacional y pesa 14.5% del PIB del país (es la entidad más grande por su PIB). Es la razón por la cual ostenta un elevado grado de apalancamiento (41.7% en 2022), ocupando históricamente el primer lugar del país.
  • La segunda entidad más importante es el Estado de México (pesa 9.1% del PIB nacional) y un bajo nivel de apalancamiento, de solo 7.8% en 2022. Nuevo León es la tercera economía más grande de México (8.4% del PIB nacional) y su crédito representa 21.5% de su PIB, el tercero más alto del país.
  • En el otro extremo están las entidades que usan mínimamente el crédito, como Veracruz, cuyo PIB representa 4.4% del PIB nacional y su crédito apenas 1.7% del nacional. Su crédito equivale a solo 5.6% de su PIB.
  • Con respecto a la cartera vencida, en general, ésta no representa un factor de riesgo importante para la economía ni para las instituciones financieras. En 2022, la cartera vencida total (comercial, sin consumo e hipotecas) se ubicó en 1.8%, con comportamientos diferenciados a nivel de las entidades y a nivel sectorial. En particular, la cartera vencida industrial promedió el año en 2.4%, destacando especialmente cuatro entidades con niveles superiores a 25%.
  • Contrastan, en parte, las elevadas carteras vencidas en algunas entidades del sureste (Campeche, Guerrero, Oaxaca), frente a carteras vencidas muy bajas de entidades del norte, como Coahuila, Durango, Nuevo León, entre otras. Entidades como Tamaulipas y Sonora, descendieron significativamente sus carteras vencidas en los años recientes.