Valle de Bravo, México – El Ayuntamiento de Valle de Bravo enfrenta una grave crisis política y administrativa tras la solicitud de licencia de la Presidenta Municipal, Michelle Núñez Ponce, para participar en el actual proceso electoral. En la quinta sesión extraordinaria de cabildo del 12 de abril de 2024, se aprobó su licencia y, el 24 de abril, se nombró a María Magdalena Rodríguez Benítez como Presidenta Municipal por ministerio de ley en la decimoquinta sesión ordinaria de cabildo.
La transición no ha sido pacífica. Inicialmente, Michelle Núñez Ponce intentó que su ex cónyuge, Juan Montes de Oca, asumiera temporalmente la alcaldía, propuesta que fue rechazada por unanimidad por el cabildo. Este rechazo llevó al nombramiento de María Magdalena Rodríguez Benítez como nueva alcaldesa, lo que provocó una respuesta violenta de Núñez Ponce. Según el Ayuntamiento, Núñez Ponce ordenó a los titulares de la administración pública desobedecer las instrucciones de Rodríguez Benítez, incluyendo a los cuerpos de seguridad municipales.
Rodríguez Benítez, al asumir el cargo, descubrió presuntos manejos irregulares que podrían constituir delitos electorales y penales, involucrando la salida de recursos económicos, humanos y materiales para apoyar la campaña de Núñez Ponce. A pesar de los llamados a la congruencia y respeto a la ley, varios funcionarios continuaron obedeciendo las órdenes de la expresidenta, lo que llevó a la remoción de tres titulares de áreas y al nombramiento de siete nuevos titulares para evitar más perjuicios a la Hacienda Pública Municipal.
La situación se agravó el 16 de mayo cuando los nuevos directores fueron retirados con violencia de sus oficinas por subordinados de Núñez Ponce, quienes bloquearon el acceso con candados y cadenas. La Tesorera Municipal también bloqueó el acceso a las cuentas municipales, impidiendo el pago a personal y proveedores y causando un perjuicio económico significativo.
Ante estos hechos, el Ayuntamiento ha presentado denuncias y está trabajando para fincar responsabilidades. Además, ha realizado un llamado a Michelle Núñez Ponce para mantener la calma y respetar las instituciones, recordándole que puede reintegrarse a sus funciones una vez concluido el proceso electoral, o antes si renuncia a su candidatura. El Ayuntamiento responsabiliza directamente a Núñez Ponce por las lesiones físicas sufridas por los servidores públicos y por las consecuencias jurídicas derivadas de la violencia y obstrucción ordenadas por ella.
El H. Ayuntamiento de Valle de Bravo, a través de su Presidenta por ministerio de ley, reitera su compromiso de no permitir la salida de fondos públicos para apoyar la campaña de Núñez Ponce y asegura que continuará trabajando para preservar el debido funcionamiento del gobierno municipal.