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Tenemos los gobiernos que nos merecemos

Amadeo Palliser Cifuentes
amadeopalliser@gmail.com

Tras el cínico, falso y desvergonzado teatro efectuado por Pedro Sánchez (PSOE), es triste y penoso ver que el PSC/PSOE mejore las perspectivas de voto, según las encuestas, y que Pedro Sánchez se pasee por Barcelona, entre aplausos y vítores. Realmente, tenemos lo que nos merecemos, como trato a continuación.

Vistas las explicaciones que ha ido efectuando el narcisista Pedro Sánchez, multiplicándose en diferentes medios estatales, de TVE y de los del Ibex 35, claro, muchos analistas consideran que la ‘espantá’ realizada fue una estratagema con finalidad electoral (catalana y europea); y yo coincido totalmente con esa interpretación.

Y todo eso nos muestra diferentes aspectos, como la debilidad del PSOE, que ha sido chantajeado por su líder, ya que efectuó esa jugada de tahúr, sin consultar a nadie, ni a los más próximos de su gobierno; y eso, les deja a todos en muy mal lugar, pues se deben doblegar a un personaje que, en realidad es un killer, que no trabaja en grupo, si no que hace que todo gire entorno suyo. Y que, una organización centenaria no tenga plan B, y que, interesadamente, deban asumir el plan que les imponen, es triste y penoso, pero allá ellos, es su problema, no el mío.

Vicenç Villatoro, en su escrito titulado ‘Pedro Sánchez, a la carta mas alta’, expresa que ‘el jugador profesional sabe qué carta ha de poner sobre la mesa cuando lo necesita y en qué momento le conviene hacerlo. Y Pedro Sánchez es un jugador profesional de la política especializado a jugárselo todo a una carta. A la carta más alta posible (…) huele el momento oportuno, las circunstancias más favorables, la carta que desconcertará más a sus adversarios, y se la juega (…) el jugador profesional no aspira a ser coherente ni profundo ni pasar a los libros de historia, aspira a ganar (…) y la carta con la amenaza de dimitir es muy buena, porque es enormemente emocional (…) y Villatoro se pregunta: ‘¿No habías visto el poder del lawfare hasta ahora? ¿sólo te parece que esto es grave cuando eres tu la víctima? ¿no has participado activamente cuando las víctimas eran otros? (…)

(elmon.cat, 30 de abril del 2024)

Elisa Beni, en su artículo titulado ‘Efectos ilimitados del desconcierto?, apunta que:

‘(…) El caso es que mientras nos distrae la disputa sobre censuras, reformas legales, control de los jueces, medios digitales espurios, los tracks dan una subida a Salvador Illa (…) ¿Y si el diseño fuese mucho más maquiavélico? ¿y si los efectos de la frivolidad presidencial tuviesen un recorrido mucho más largo? (…) A Sánchez le espera una endemoniada situación después de las catalanas (…) por eso ‘la insólita actuación del presidente del gobierno español ha reventado los marcos de las elecciones catalanas. Estaríamos, así al 12 de mayo. Puigdemont, sin posibilidad de gobernar, ha prometido irse y todavía no tendremos aprobada la ley de la amnistía. Sánchez reconquista la Generalitat para un partido nacional español. La ley de la amnistía no saldrá del senado hasta el 14 de mayo y ha de ser revalidada finalmente por el congreso cuando Armengol convoque la votación. Pero, atención, que faltan solo 14 días para que legalmente se puedan volver a convocar elecciones generales en julio. En este guion malévolo – es sólo eso, un guion – en el congreso, la presidenta se hace la remolona con esta convocatoria del pleno y ¡pam!, el día 29 el presidente del gobierno español convoca elecciones generales, disuelve las cámaras … y con eso decae la ley de amnistía (…)

(Elnaciona.cat, 1 de mayo del 2024)

Asimismo, y como dijo en su cuenta de X, Íñigo de Miguel, doctor en derecho y filosofía, e investigador:

‘Lo que más me sorprende de Sánchez o de su esposa es que no hayan presentado una querella contra los medios que, según él, han propagado falsedades que afectan a su honor. Ya que ha de encabezar la lucha contra todo esto, ¿no debería hacerlo?, ¿o qué mensaje nos traslada?

Hoy he oído que Pedro Sánchez había denunciado al segundo responsable del ministerio de interior de cuando el titular era Jorge Fernández Díaz (PP), por falsedades diciendo que su suegro, tenía un negocio de saunas y prostitución. Pero, de eso hace más de seis años.

¿Esa denuncia no la debería hacer su esposa?, o ¿el ‘machirulo Pedro Sánchez muestra así, su falso feminismo?

¿Y lo hace ahora, que ya es historia?, pero no lo hace contra la actual denuncia de Begoña Gómez por tráfico de intereses y falseamiento documental, por la vinculación con el Grupo Globalia (por el desarrollo de los estudios en la Universidad Complutense), con el empresario Víctor de Aldama y, también, por su relación con el África Center y la embajada de Ghana.

Tal como comenté, siempre ha de prevalecer el principio de inocencia, máxime cuando las denuncias provienen de la extrema derecha; pero, la realidad es que ‘la mujer del César no sólo debe ser honrada, sino que también ha de parecerlo’. Y siempre ha de prevalecer la transparencia.

Y, claro, si Pedro Sánchez se ha sentido tan ‘tocado’ por esa denuncia admitida a trámite por el juzgado de instrucción número 41 de Madrid, lo que hemos visto es que la fiscalía, que depende jerárquicamente del gobierno, en plena ‘espantá’, actuó de oficio, solicitando el archivo de la causa. Pero, Pedro Sánchez no ha denunciado esas acusaciones, dejando abiertas todas las dudas, sobre las que no ha querido entrar, limitándose a decir que todo son falsedades.

Espero que un día sepamos la verdad, pero, de momento, vemos que la estratagema, el órdago efectuado por Pedro Sánchez, le está dando resultado, ya que las encuestas sobre su candidato Salvador ISLA (Illa) en las próximas elecciones catalanas, previstas para el 12 de este mes, están subiendo como la espuma, ya que ahora, el ‘leitmotiv’ de la campaña es la lucha contra los pseudo medios de comunicación y contra las falsedades.

Así, también se evita entrar a debatir sobre la presunta mala gestión de Salvador ISLA durante su ministerio de sanidad en la pandemia, y sobre su mala gestión, no ya presunta, sobre su paso por la alcaldía de la Roca del Vallés y sobre su período de director de infraestructuras de la Generalitat, en el que se construyeron 3 prisiones y el palacio de justicia, y que se vio forzado a dimitir, justo tres días antes de la inauguración de su proyecto estrella, el mencionado palacio de justicia. Sobre estos temas, en anteriores escritos he hecho referencia a informaciones de Vicent Partal y Ramón Barnils, en los que se detalla de forma pormenorizada la sombre de esa gestión, y que, tanto de su cargo de alcalde, como de director, fue cesado por su propio partido … pero de todo esto no se va a hablar, gracias a la estratagema adoptada por Pedro Sánchez.

Es evidente que Pedro Sánchez precisa, imperiosamente, que Carles Puigdemont no llegue a recuperar su puesto de president de la Generalitat, tal como expliqué en mi escrito de ayer, pues sería una imagen que el estado español y todas sus cloacas, no podrían asimilar, y que, acusarían a Pedro Sánchez de haberla posibilitado.

Todo esto no es nada nuevo, pues sabemos que todos los poderes intentan actuar de forma absolutista.

Pero lo que me parece inconcebible y propio de vasallos, es que aceptemos caer de cuatro patas en sus trampas. Y me demuestra que no tenemos memoria, pues:

  • El 21 de diciembre del 2018, Barcelona amaneció blindada, ante la convocatoria de realización del consejo de ministros en esa ciudad, 9000 agentes en las proximidades de la Llotja del mar para garantizar la seguridad y el orden, las calles cortadas a mucha distancia para evitar la imagen de los abucheos y muestras de rechazo, es decir, para evitar la libre expresión de manifestación y de opinión pacíficas.
  • En octubre del 2019, Pedro Sánchez acudió el Hospital de Sant Pau, en Barcelona, para visitar a unos agentes de la policía ‘heridos’ en la última semana de manifestaciones en defensa del Tsunami Democràtic, y, al salir del hospital y encontrarse una manifestación pacífica, la imagen que más sorprendió fue que un miembro de la escolta del presidente lució un subfusil MP-5 por la ventana de uno de los coches del séquito, con la ventana bajada.

No hace falta recordar los desplantes a las visitas de Felipe VI. Con esos dos ejemplos, ya es suficiente para expresar nuestra desmemoria.

Pues bien, ayer, 1 de mayo, Pedro Sánchez, acompañado de su esposa y una de sus hijas, vino a Barcelona y visitó el sucedáneo de la feria de abril, acudió a la caseta que su partido tiene en esa feria, rodeados de aplausos y peticiones de fotos y, después, se desplazaron al restaurante Set Portes, un clásico de la ciudad, rechazando un comedor privado, prefirió el comedor general, lo que permitió que camareros y clientes se acercaran a darle ánimos.

Yo me pregunto: ese cambio ¿es debido a la amnistía? ¿a su reciente show de falso anuncio de dimisión? ¿al cansancio tras tantos años? ¿a todo junto?

Efectivamente, los palmeros de turno, por más que los magnifiquen ciertos medios, fueron apenas un minúsculo grupo, nada representativo de la generalidad. Pero demuestra, asimismo, que los independentistas somos unos desmemoriados, que ahora ya tanto nos da ‘ocho que ochenta’.

Otra pregunta que me hago es, ¿por qué ningún medio de comunicación ha dado ninguna imagen de la visita a la feria o del restaurante, en la que se viera a Begoña Gómez (ya no digo a la hija, claro, por ser menor de edad, supongo), pero que la esposa del jefe de gobierno acuda a actos públicos y ningún medio la muestre, me parece una censura total. En todas las fotos aparece él solo.

Y la peor censura es la autoejercida con carácter preventivo, y eso ya es el colmo de los colmos, y demuestra nuestro servilismo y vasallaje.

Hoy, jueves, Pedro Sánchez volverá a Barcelona, para respaldar a Salvador ISLA (Illa) en un acto de su partido en Sant Boi. Y recuerdo que hace años, se decía, ‘Sant Boi, parada y fonda’, haciendo alusión al centro psiquiátrico que había en esa localidad. Y también recuerdo el chiste del paciente ingresado que miraba por la ventana y decía que ‘había más locos fuera que dentro’. Y me parece que tenía razón.

Pedro Sánchez quiere dar un aire de normalidad a esa campaña, volcándose en cuerpo y alma, pero olvidando, voluntariamente, que hay políticos como Carles Puigdemont que no pueden participar con igualdad de condiciones, ni Marta Rovira (ERC) puede participar en esa campaña, ni otros. Por eso, estamos en una campaña fuertemente adulterada por la represión, como explicó Vicent Partal, en su artículo de ayer, con ese mismo argumento.

Y eso es una desvergüenza más de ese tramposo jugador, pero que los catalanes, independentistas y unionistas, caigamos en esas trampas tan absurdas e infantiles, me parece que demuestra que, como dice el refrán, ‘tenemos los gobiernos que nos merecemos’.

Joseph-Marie, conde de Maistre (1753 – 1821), político y filósofo saboyano, fue el autor de la célebre frase mencionada: ‘Cada nación tiene el gobierno que se merece’.

Pues bien, está claro, nos merecemos ser gobernados por el tándem Pedro Sánchez y Salvador ISLA (Illa), por los siglos de los siglos, amén.

Muchas veces me he repetido mi mantra de que me tendré que ir a la Isla de Tonga (por estar en las antípodas) y si tuviera el valor preciso para romper con todo, me iría, bien lejos, y que aquí sea lo que los vasallos quieran.

Democritus (Demócrito, 460 a.C. – 370 a.C.) escribió que ‘quien procede injustamente es más desgraciado que la víctima de su injusticia’, y, rizando el rizo, creo que se puede deducir que, en ese caso, las víctimas también somos desgraciadas, entendiendo ese término como insulto; y los únicos que se salvan son los imbatibles, los irreductibles, que siguen considerando, como Avram Noam Chomsky (n. 1928) que ‘Los derechos no se conceden, se conquistan’.

Para acabar este pesimista retrato de nuestra sociedad catalana, me parece oportuno reproducir los mensajes más célebres del grupo argentino de Les Luthiers, creado en 1967:

  1. Todo tiempo pasado fue anterior.
  • El que nace pobre y feo tiene grandes posibilidades de que al crecer se le desarrollen ambas condiciones.
  • El ego es ese pequeño argentino que todos llevamos dentro.
  • Si no puedes convencerlos, confúndelos.
  • Evite accidentes. Hágalo a propósito.
  • Lo importante es el dinero, la salud va y viene.
  • Errar es humano, pero echarle la culpa a otro es más humano todavía.
  • No soy un completo inútil. Por lo menos sirvo de mal ejemplo.
  • Tener la conciencia limpia es síntoma de mala memoria.
  1. Todo es relativo. El tiempo que dura un minuto depende del lado de la puerta del baño que te encuentres.
  1. El que es capaz de sonreír cuando todo le está saliendo mal es porque ya tiene pensado a quién echarle la culpa.
  1. Toda cuestión tiene dos puntos de vista: el equivocado y el nuestro.
  1. La verdad no es lo que importa, sino tener razón.
  1. La pereza es la madre de todos los vicios, y como madre, hay que respetarla.

Sócrates (470 a.C. – 399 a.C.) pensó que ‘el hombre se comporta mal porque es ignorante’.

Pues bien, allá cada uno con sus ideas, con su conciencia.