- Trabajadores de la UAM confirman venta de plazas y exigen depuración en el SITUAM.
- Acusan al sindicato de priorizar sus intereses sobre los derechos de la base trabajadora.
Ciudad de México.- Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) han manifestado su descontento y frustración ante las mesas de negociación que sostiene el Sindicato Independiente de Trabajadores de la UAM (SITUAM), calificándolas como estériles y sin avances concretos, acusando a la representación sindical de no atender las necesidades reales de la base trabajadora y de perpetuar prácticas que dañan la confianza y el bienestar de quienes forman parte de la institución.
Entre las denuncias más graves, los trabajadores han confirmado la venta de plazas laborales, que según señalan, pueden costar hasta 50,000 pesos. Esta situación, conocida por muchos dentro de la UAM, ha sido motivo de constantes exigencias para una limpieza completa en la cúpula sindical. Sin embargo, aseguran que los líderes sindicales se reciclan en los puestos de poder, evitando que se produzcan cambios reales. «Esto lleva años ocurriendo, pero no hay voluntad para acabar con estas prácticas. Todo se queda en promesas y discursos vacíos», declaró un trabajador que prefirió mantenerse en el anonimato.
Otro punto de conflicto es el manejo del fondo de resistencia sindical, que asciende a más de 22 millones de pesos. Los trabajadores acusan a los líderes del SITUAM de buscar una huelga no para defender los derechos laborales, sino para poder disponer de estos recursos, que aseguran se reparten entre los miembros de la comisión de huelgas. «Cada vez que hay una huelga, los que más sufrimos somos nosotros. Dejamos de cobrar durante semanas o meses y no tenemos ninguna certeza de que se pagarán los salarios caídos, mientras los dirigentes sindicales se benefician», expresó un empleado administrativo.
La percepción de que los intereses de la cúpula sindical están por encima de los de los trabajadores ha generado un ambiente de desconfianza y descontento generalizado. Muchos exigen una reestructuración profunda en el sindicato, con el objetivo de garantizar una representación genuina que priorice las necesidades de la base trabajadora y no los intereses personales de los líderes. Sin embargo, hasta ahora no se ha emitido una respuesta oficial por parte del SITUAM a estas acusaciones.
Mientras tanto, los trabajadores de la UAM permanecen en incertidumbre, temiendo que la falta de avances en las negociaciones derive en una huelga que, lejos de solucionar sus problemas, los afectará aún más